una señora camina con tacones imposibles, son las nueve menos diez de la mañana y a cada paso se tambalea como una jirafa recién nacida... no creo que llegue muy lejos, hoy.
he seguido con el Nunca me Abandones, y cada vez me gusta más, lo voy dosificando, así, poquito a poco, como el chocolate que efe deja que se le deshaga en la boca. antes fue Murakami, ahora, Ishiguro, a ver quién gana.
Acaba de decirme el jefe que se va a aquella comida, dana te veo luego.
Antes, vuelvo a decirle a Charo que si, que a las siete en la puerta, que la voy a llevar a la basílica de santa maria del mar, a escuchar alguna lírica en italiano.que le gustará, nos invita el consulado italiano, y la iglesia es bonita. he llegado a la oficina esta mañana y he vuelto a mirar la invitacion, todo bien, excepto una tontería, los italianos desgañitándose acontecieron ayer. gran despiste, pero vamos, que no me extraña, que tengo la cabeza más para allá que para acá, y últimamente hago cosas a las que no encuentro sentido, pero que hago. sin más, eso sí, sin arrepentiemientos, que ya es un algo.
(se ha ahorcado el caníbal de México, lo han encontrado en prisión, colgando de su cinturón... se podría haber comido antes la cabeza, antes que a su novia quiero decir)
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