- Margot me dijo anoche que me quería.
- te dije que te estabas metiendo en un lío.
y Pedro lo sabía. no podía traicionar así a su mujer. ni a sus hijos. pero ahí estaba, escapándose con Margot cada vez que su mujer tenía clase de yoga. eso eran demasiadas veces al mes.
- da igual, no volveré a llamarla - dijo Pedro en voz alta mientras se le partía el corazón en pedazos tan pequeños que resultaría imposible contar. sabiendo que la ilusión y las ganas de vivir marcharían por siempre al enfrentarse a tan temida frase. Te quiero resultó ser el final de la historia y el principio de su triste y gris existencia a partir de entonces.
anoche le dije a Pedro que le quería. fue en un momento preciso, justo al recibir ese beso en la espalda cuando ninguno de los dos hacía más que respirar tranquilos, y no pensar en nada.ha sido el único momento en estos tres años y medio de relacion con Pedro que he sentido que le quería. jamás lo sentí antes y jamás volveré a sentirlo. fue justo decirle lo que sentía porque aquello era lo que sentía justo en aquel momento.no quiero volver a verle, ni siquiera me apetece, pero le quise en ese preciso segundo. y se lo hice saber.